Mesoamérica en el umbral de una larga guerra: el balance de las fuerzas
En agosto de 1520, con el ataque de tlaxcaltecas y españoles contra el bastión mexica en Tepeaca se inició una larga y continua serie de campañas militares que llevarían al sitio de México-Tenochtitlan casi un año después. La sombra de la guerra oscureció el horizonte y con ella se desataron violencias, muertes y destrucciones sin precedentes en la historia mesoamericana.
Los amoxtli de esta semana presentan un balance de las fuerzas de los bandos enfrentados al inicio de este guerra: por un lado, los aliados indoespañoles, encabezados por Tlaxcala y por Hernán Cortés; por el otro, los mexicas.
Miguel Pastrana describe con detalle la situación estratégica de un bando y otro y explica los desafíos enfrentados por los mexicas, quienes debieron reconstruir su ciudad y el poderío de su imperio en medio de una epidemia de viruelas.
Carlos Brokmann describe las razones que impulsaron a los aliados indoespañoles a atacar Tepeaca y la violencia que implicó esta nueva ofensiva, incluida la captura y esclavización de la población civil.
Federico Navarrete, por su parte, plantea que en verdad las guerras de conquista iniciadas en el verano de 1520 no terminaron con la conquista de México en agosto de 1521, sino que habrían de durar dos décadas más y alcanzar buena parte del territorio de lo que hoy es nuestro país y de América Central. Propone, además, que fueron un nuevo tipo de guerra total, sin precedente en la historia mesoamericana.