2) La guerra por Federico Navarrete
Cuando hablamos de la conquista de México pensamos de inmediato en la guerra: los españoles conquistaron por las armas a los indios, o a los mexicas. Se afirma muchas veces que esto se debió a la superioridad tecnológica de las armas españolas. Como vemos en los amoxtlis (artículos históricos), fragmentos de fuentes históricas, imágenes y otras informaciones, las armas de ambos bandos eran variadas y tenían diferentes capacidades, y los españoles aprendieron tanto de las armas mesoamericanas como los indígenas de las armas europeas.
Sin embargo, la guerra para los españoles y para los mesoamericanos era muchas cosas, algunas parecidas y otras diferentes. Ambas tradiciones, por ejemplo, vinculaban la violencia bélica con la religión: los conquistadores querían someter a los infieles por la paz o por las armas, los mesoamericanos medían la fuerza de un pueblo con la fuerza de su dios patrono. En ambas culturas, la guerra estaba vinculad al poder y al prestigio masculino.
En contraste, las diferencias existían diferencias claras en los objetivos de las guerras. Hernán Cortés y sus expedicionarios buscaban someter a los señoríos indígenas y apoderarse de su territorio por medio de las armas. Los mesoamericanos, en cambio, no peleaban sólo para imponer dominio o conquistar territorios, sino también para hacer cautivos. Estos objetivos implicaban diversas lógicas estratégicas, diversas formas de hacer la guerra.