Tras la victoria Cortés decide regresar a Tepeaca
La ciudad estaba tan desamparada, que sólo se pudieron hallar entre los prisioneros tres o cuatro de los naturales; por cuyo medio trató Hernán Cortés de recoger a los demás, enviándolos a los bosques donde tenían retiradas sus familias, para que de su parte, y en nombre del rey, ofreciesen perdón y buen pasaje a cuantos se volviesen luego a sus casas; cuya diligencia bastó para que se poblase aquel mismo día la ciudad, volviéndose casi todos a gozar del indulto. Detúvose Cortés en ella dos o tres días para que perdiesen el miedo y abrazasen la obediencia con el ejemplo de Guacachula. Despidió al mismo tiempo las tropas de los caciques amigos, partiendo con ellos el despojo de ambas facciones; y se volvió a Tepeaca con sus españoles y tlascaltecas, dejando libre de mejicanos la frontera, obedientes aquellas ciudades que tanto suponían, asegurado con la experiencia el afecto de las naciones amigas, y frustradas las primeras disposiciones del nuevo emperador mejicano.
- Tepeaca
- Hernando Cortés
- indios aliados de Cortés
- indios tlaxcaltecas