Los tlaxcaltecas reciben a los españoles

Texto original con ortografía de la época:

Luego esta nueva fué llevada a los Señores de Tlascala (los cuales estaban bien confiados que tenian su reino muy bien murado, con aquellos Soldados Otomies) oyendo como todos habían sido muertos, sin quedar nadie; recibieron de esta nueva grandisimo espanto, tanto que salieron de si, y comenzaron a temblar de miedo. Los Españoles como hubieron decansado aquel dia, el trabajo de aquella Batalla, comenzaron a marchar otro dia hacia Tlascala: en este espacio, los Señores y principales, y valientes hombres de Tlascala, entraron en consejo consigo mismos, para ver lo que les convenia hacer en este trance; dando y tomando gran rato, vinieron a concluir todos, que pues que aquella Gente que venia, habia hecho tan gran destrozo, y matanza en sus fortisimos Soldados en muy brebe tiempo, no [36] les convenia salirles de Guerra, sino que se diesen a ellos saliendoles de paz, y ofreciéndoles bastimento con mucha humildad y reverencia; y asi fue hecho, que salieron todos los principales y Señores, y hombres valientes sin ningunas armas, y aderezados como de fiesta, llevando todos los bastimentos que les fué posible y con gran reverencia y humildad, ofrecieron su presente, y sus personas a la voluntad del Capitán Don Hernando Cortes: El Capitán los recibió con gran voluntad, y se les mostró muy amigo, y también les ofreció la amistad de todo su Ejercito; y asi se fueron todos juntos a la ciudad de Texcala, que entonces tenia este nombre, y después acá la llaman Tlascala, como se llama ahora, y ellos se llaman Tlascaltecas.

Para citar:
Sahagún, Bernardino de , Historia general de las cosas de la Nueva España, , University of Utah, 1989 [1840], pp. 35-36
Lugar(es):
  • Tlaxcala
Persona(s):
  • Hernando Cortés